Hace años las abuelas tenían remedios caseros para todo: dolor de barriga, diarrea, insomnio, dolor de cabeza, trucos de belleza, etc. Pero poco a poco todo eso se ha ido perdiendo. Es más, cuando hace años mi abuela intentaba darme alguno de sus remedios huía como una loca de ella porque no cría ni una sola palabra de lo que me decía. Para mí eran cuentos chinos, pero qué pena no haberle hecho caso en aquel entonces.
Como todos, yo soy una más que sigue la corriente. Soy un puntito más entre la masa que se mueve junto a todo el rebaño y por eso sólo hago caso a las modas aunque aparentemente intente no hacerlo. Me doy cuenta a veces cuando empiezo a hacer cosas que hacen todos los demás y que antes no hacía pero he llegado a la conclusión de que nuestra cultura es así y de que por mucho que quieras ser diferente acabas cayendo irremediablemente en todas estas cosas.
Ahora están de moda las hierbas y cuidarse tanto por fuera como por dentro. Últimamente he oído hablar de cola de caballo, de pasiflora, de algas marinas, de bebidas vegetales… y cada producto tiene un beneficio para nuestro organismo diferente al anterior. Actualmente me he hecho fan de este herbolario en Málaga que tiene tienda online porque así puedo acceder a los productos a través del ordenador y hacer la compra al mismo tiempo que, si tengo alguna duda, puedo acudir en persona al establecimiento para realizar mis preguntar o saber más acerca de algo. Y el caso es que cada vez que me compro mis cositas me acuerdo de mi abuela y de sus remedios.
Me acuerdo por ejemplo de cuando me quejaba de dolor de cabeza después de pasarme horas estudiando con 18 años para la selectividad y ella me intentaba convencer para probar su remedio con vinagre de manzana que yo siempre rechazaba. O cuando quería rociar al pequeño Pupi (mi gato) con jugo de limón para que no se le pegaran las pulgas, o cuando me constipaba y tenía dolor de garganta y ella quería que hiciera gárgaras tres veces al día con agua tibia y sal. Nunca le hice caso y cuánta razón tenía.
Hoy por hoy podemos ver incluso a los medios de comunicación publicando artículos al respeto. Por ejemplo, 10 remedios caseros y naturales para combatir las migrañas, o Cinco remedios caseros para tus mascotas, o Siete remedios caseros para el dolor de garganta, y muchos más. Y esto es algo que hacen porque la sociedad vuelve a tener esas costumbres no porque les haya dado un “volao” y hayan decidido ponerse a publicar esta serie de artículos. Pensad que los medios de comunicación son, al fin y al cabo, un negocio, y como tal tiene que vender para tener beneficios así que sólo publicarán noticias y artículos de interés nacional con el fin de que la población quiera leerlos y, por tanto, pagar por ello. Así de simple.
En definitiva. Si fuéramos un poquito más inteligentes dejaríamos de seguir a las moda sy haríamos más caso a las personas que saben más que nosotros pero, desgraciadamente sólo escuchamos sus consejos cuando la población nos dice que está bien hacerlo y mientras que no sea así, creemos que son cuentos chinos.