Cuando hablamos de decoración, todos solemos pensar en lo mismo: cuadros bonitos pintados a mano (ya sea por uno mismo o por un profesional), utilizar colores de paredes totalmente innovadores, pintar dibujos en las paredes que hagan resaltar el lugar, incluso pensamos en adquirir muebles totalmente innovadores y modernistas que le den una visual totalmente diferente a la panorámica que tenemos en nuestra casa.
Pero se nos olvida algo fundamental: antes de que existiese la pintura, antes de que existiesen los muebles modernos o las ventanas con formas extrañas… se decoraba con elementos naturales que, a pesar de ser simples, embellecían la casa de una forma sutil y fresca.
Ahora, venimos a hablarte de un método de deshidratación de flores que hacen mantener toda su belleza… y que no te dejará en absoluto indiferente.
Vamos a explicaros brevemente qué es una flor preservada y cuál es su historia
Antes que nada, vamos a intentar explicaros, de forma sencilla, qué son. Las flores conservadas son flores que han sido tratadas artificialmente para que mantengan su belleza y frescura durante un período de tiempo prolongado. Es decir, esta técnica va a conseguir que la flor dure mucho más tiempo que de forma natural.
Aunque la tecnología moderna ha permitido la creación de flores conservadas de alta calidad y a pesar de que suena alto totalmente moderno, la realidad es que la técnica de conservación de flores se remonta a la antigüedad.
En la época romana, se utilizaban coronas de flores frescas para honrar a los difuntos. Es una técnica antiquísima que se lleva haciendo milenios, porque la partida de los nuestros es algo terrible que debemos conmemorar y respetar de manera simbólica. Y las flores siempre han formado parte de este antiguo ritual. ¿Qué sucedía? Que, a pesar de su belleza, estas coronas tenían una vida útil limitada y perdían su belleza en muy poco tiempo. Para solucionar este problema, los romanos comenzaron a utilizar técnicas para mantener las flores mucho más tiempo. Una de las técnicas más comunes consistía en sumergir las flores en una solución de agua y sal para mantener su frescura y belleza durante un tiempo prolongado.
Durante la Edad Media, se empezaron a utilizar una sencilla técnica para mantener las flores, utilizando cera de abeja para tal fin. Las flores se sumergían en cera caliente, lo que las cubría con una capa protectora que las hacía durar más tiempo. Era como una capa caliente protectora a su alrededor que la ayudaba a mantenerse durante un tiempo más prolongado.
En el siglo XIX fue, como curiosidad, cuando se popularizó el uso de técnicas de prensado de flores para conservar la belleza de las flores de manera natural mucho más tiempo. Además, se desarrollaron técnicas de secado de flores, que permitían conservar su belleza y color durante un período de tiempo mucho mayor.
En la década de 1990, se desarrolló una nueva técnica para conservar flores utilizando una solución líquida y productos químicos. Esta técnica permitió la creación de flores conservadas de alta calidad que parecían frescas y que duraban hasta varios años.
Hoy en día, las flores conservadas son una opción popular para decoraciones y arreglos florales en eventos especiales, ya que ofrecen la belleza y frescura de las flores frescas sin la necesidad de reemplazarlas periódicamente.
La técnica de hicieron de flores continúa evolucionando y mejorando, permitiendo la creación de flores preservadas (conocidas, además, como conservadas) de alta calidad y durabilidad.
A continuación, vamos a darte una serie de sugerencias de cómo usar flores preservadas para decorar tu hogar con un brillo más luminoso
- Ramos de flores. Los ramos de flores preservados son una excelente opción para decorar cualquier espacio de tu hogar. Puedes colocarlos en un jarrón, florero o en un cesto para crear un ambiente acogedor y elegante. Sea cual sea la idea que se te venga a la mente y el lugar donde desees colocarlo, un ramo de flores siempre es una opción muy vistosa para darle un toque alegre al espacio más oscuro.
- Coronas de flores. Estas son geniales para colgarlas detrás de las puertas o junto a las ventanas, ya sea en Navidad o en cualquier otra época del año. ¡Incluso puedes hacer una corona de flores con flores típicas de verano!
- Flores enmarcadas. Las flores preservadas también se pueden enmarcar y utilizar como decoración de paredes, ¡como cualquier otro tipo de flor! De hecho, las mentes más creativas podrían incluso llegar a crear una galería de arte en cualquier rincón.
- Centros de mesa. Los centros de mesa con flores preservadas son perfectos para crear una atmósfera cálida y acogedora en cualquier reunión con amigos o familiares. Puedes utilizar un jarrón vistoso o una caja de madera hecha totalmente a mano y pintada por ti para crear un arreglo elegante y sofisticado. De hecho, poner un centro de mesa con flores vistosas y un jarrón artesanal es algo que da mucho glamour a tu casa.
- Detalles decorativos. Las flores conservadas también se pueden utilizar para decorar diferentes detalles de tu hogar, como las perchas de las puertas, los pomos de los cajones o incluso para decorar tus libros favoritos. Incluso puedes usarlas en los regalos, ya sea en un marcapáginas, en un marco de fotos o en un papel de regalo.
Las opciones son infinitas, pero más infinita es la creatividad humana. Pon tu mente a trabajar, porque las flores preservadas son una opción duradera y hermosa para decorar tu hogar.
Ventajas de las flores preservadas con técnicas especializadas:
Desde Mundo Flor nos explican, con una enorme paciencia y un gran cariño, una serie de ventajas que traen consigo las flores preservadas en al tiempo:
- Durabilidad. Como comprobarás si te decides a usarlas en tu casa, las flores conservadas pueden durar hasta varios años sin perder su belleza y frescura. Esto las convierte en una opción ideal para decoraciones a largo plazo, como bodas, eventos corporativos, hoteles y tiendas.
- Mantenimiento. Las flores preservadas no necesitan agua ni cuidados especiales, lo que las convierte en una opción práctica y conveniente para la decoración de interiores y exteriores. Por lo tanto, si eres una persona olvidadiza, esta es una mejor opción para ti que una planta real, a la que vas a tener que regar y cuidar a diario.
- Variedad. Las flores preservadas están disponibles en una amplia variedad de especies y colores, lo que permite una gran flexibilidad en la creación de arreglos florales y decoraciones.
- Aspecto económico. Aunque las flores conservadas pueden ser más caras que las flores frescas, su durabilidad y bajo mantenimiento hacen que sean una opción más rentable a largo plazo. Es decir, vas a gastar menos en flores si compras un ramo preservado que si compras un ramo fresco que se va a poner mano en unos pocos días.
En contraposición, también puedo hablarte de una serie de desventajas:
Nada en este mundo tiene aspectos totalmente positivos. Y las flores conservadas tampoco se libran de una serie de desventajas que tienes que tener en cuenta si las vas a usar para decorar tu hogar:
- Como ya has leído, pueden ser más costosas. Esto ya lo hemos explicado antes: como están tratadas para durar un lapso de tiempo más largo, son más caras que las flores convencionales y naturales. Eso puede ser una ventaja a largo plazo, porque ahorrarás en el tiempo… pero, en el momento, puede ser caro para una persona que no disponga de muchos medios económicos.
- Limitaciones en la elección de especies y colores. No todas las flores que conoces y existen soportan este proceso de conservación. Esto quiere decir que, cuando vayas a encargar un ramo, vas a tener que asesorarte para descubrir si el ramo que tienes en mente soportaría este proceso. Por lo tanto, te verías totalmente limitado en referencia a la cantidad de flores que puedes utilizar para decorar.
- Fragilidad. Para que lo sepas, las flores conservadas son mucho más frágiles que las flores frescas y pueden dañarse fácilmente si no se manejan con cuidado. Por lo tanto, vas a tener que tratarlas con especial cuidado si quieres que te duren un largo tiempo. Además, sus pétalos pueden desprenderse o perder su forma original si se exponen a cambios bruscos de temperatura o humedad. En consecuencia, los cambios ambientales pueden dañarla tanto o más que la manipulación física. ¿Estás seguro de que puedes soportar esta responsabilidad?
- Aspecto menos natural. Aunque las flores conservadas se ven hermosas y frescas, no tienen la misma apariencia y sensación que las flores frescas. Algunas personas pueden preferir la belleza y frescura de las flores frescas. Yo, por ejemplo, prefiero que las flores crezcan libres y sanas en el campo y limitarme a olerlas… pero eso ya es cosa de cada uno, por supuesto.
- Limitaciones en la reutilización. A diferencia de las flores frescas, que se pueden reciclar después de su uso, las flores conservadas no son biodegradables y no se pueden reciclar. Esto significa que no se pueden reutilizar de la misma manera que las flores frescas.